Desde bolsas atrapadas en arbustos y árboles hasta botellas flotando en el océano, los signos visibles de nuestra adicción al plástico de un solo uso están en todas partes. Todos sabemos que la contaminación plástica es un gran problema. Pero de lo que se habla menos es de cómo el plástico contribuye al calentamiento global.
Desde la forma en que los plásticos afectan los ambientes marinos hasta cómo se desechan, así es como se suman al problema del cambio climático.
La contaminación plástica va en aumento
Nuestro apetito por los plásticos está alimentando la creciente demanda de productos petroquímicos , dice la Agencia Internacional de Energía. Incluso mientras tratamos de frenar el uso de combustibles fósiles en sectores como el transporte y la calefacción, el consumo de plásticos solo aumentará, según nuestra trayectoria actual. El Centro para el Derecho Ambiental Internacional (CIEL) estima que si las tendencias continúan, los plásticos representarán el 20% del consumo de petróleo para 2050 .
Los residuos plásticos también provocan el cambio climático
Deshacerse de todo este plástico también genera problemas para el planeta. Solo el 16 % de los plásticos se recicla ; el resto va al vertedero o es incinerao, o simplemente llega a la naturaleza donde no debería estar.
Gran parte del plástico desechacdo termina en nuestros ríos y océanos. Esto no solo es un peligro para los animales y las plantas cuyos hábitats se han convertido en parches de basura acuáticos, sino que también representa una amenaza para el clima, ya que el plástico libera gases de efecto invernadero a medida que se descompone lentamente. La luz del sol y el calor hacen que se libere metano y etileno, y a un ritmo cada vez mayor a medida que el plástico se fragmenta en pedazos cada vez más pequeños.
La incineración de plástico también es un problema
La quema a cielo abierto de desechos es común en muchas partes del mundo y es una fuente importante de contaminación del aire. La quema de plásticos libera un cóctel de químicos venenosos que dañan la salud del planeta y de las personas expuestas al aire contaminado. El carbono negro es uno de esos contaminantes graves: tiene un potencial de calentamiento global hasta 5000 veces mayor que el dióxido de carbono.
En 2019, CIEL estimó que la producción e incineración de plástico agregaría 850 millones de toneladas métricas de gases de efecto invernadero a la atmósfera , lo que equivale a 189 centrales eléctricas de carbón. Para 2050, esto podría aumentar a 2,8 gigatoneladas de dióxido de carbono por año, o el valor de 615 plantas de carbón.
Una economía circular es una parte crucial de la solución a la contaminación plástica
La clave para abordar el problema del plástico es establecer una economía circular. El plástico que no se puede eliminar del sistema debe ser reutilizable, reciclable o compostable. En comparación con los negocios habituales, una economía circular podría reducir el volumen de plásticos que ingresan a nuestros océanos en un 80 % cada año, según la Fundación Ellen MacArthur. También podría generar ahorros anuales de $ 200 mil millones, reducir las emisiones de gases de
